Carne molida con salsa inglesa
La carne molida con salsa inglesa es un plato versátil y sabroso que puede servirse como plato principal acompañado de arroz, pasta o vegetales, o también como relleno para tacos, burritos o empanadas. Esta receta combina la jugosidad de la carne molida con el sabor único de la salsa inglesa, creando un plato delicioso y reconfortante.
Ingredientes:
- 500g de carne molida (puede ser de res, cerdo o una mezcla)
- 1 cebolla picada
- 2 dientes de ajo picados
- 2 cucharadas de salsa inglesa (Worcestershire)
- 1 lata de tomates triturados
- 1 cucharadita de azúcar
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva o vegetal para cocinar
Instrucciones:
- Preparación de los ingredientes: Pica finamente la cebolla y los dientes de ajo. Abre la lata de tomates triturados y reserva.
- Salteado de la carne: Calienta un poco de aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Agrega la cebolla picada y el ajo picado, y cocínalos hasta que estén dorados y fragantes, unos 3-4 minutos. Luego, añade la carne molida y cocina, deshaciendo los grumos con una cuchara de madera, hasta que esté dorada y cocida por completo, unos 5-6 minutos.
- Añadir la salsa: Una vez que la carne esté cocida, incorpora la salsa inglesa (Worcestershire) y mezcla bien para que se integre con la carne.
- Agregar los tomates: Vierte los tomates triturados sobre la carne y mezcla. Añade el azúcar y sazona con sal y pimienta al gusto. Reduce el fuego a medio-bajo y deja cocinar la mezcla durante unos 15-20 minutos, o hasta que la salsa se espese ligeramente y los sabores se mezclen bien.
- Servir: Una vez lista, sirve la carne molida con salsa inglesa caliente, acompañada de arroz, pasta o como prefieras. Puedes espolvorear un poco de queso rallado por encima para darle un toque extra de sabor.
Resultado final:
La carne molida con salsa inglesa es un plato reconfortante y sabroso que combina la jugosidad de la carne con el sabor único de la salsa. La carne se presenta tierna y llena de sabor, con un toque ligeramente dulce y especiado de la salsa inglesa. La salsa, por su parte, se espesa ligeramente y se impregna de los sabores de la carne y los tomates, creando una combinación deliciosa que seguro será un éxito en la mesa.