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Pollo horneado

El pollo horneado es una deliciosa comida que se prepara asando un pollo entero en el horno después de sazonarlo y marinarlo adecuadamente. Es un plato versátil y popular en muchas culturas culinarias, ya que puede adaptarse a diferentes gustos y preferencias de sabor.

Para preparar un pollo horneado, necesitarás los siguientes ingredientes:

  1. Pollo entero: Preferiblemente de buena calidad y de tamaño adecuado para tu grupo.
  2. Condimentos: Puedes utilizar una variedad de condimentos según tus preferencias, como sal, pimienta, ajo en polvo, cebolla en polvo, pimentón, tomillo, romero, entre otros.
  3. Aceite de oliva o mantequilla: Para untar el pollo y ayudar a que se dore en el horno.
  4. Vegetales (opcional): Puedes acompañar el pollo con vegetales como zanahorias, papas, cebollas y pimientos para agregar sabor y textura al plato.

Ahora, los pasos para cocinar el pollo horneado son los siguientes:

  1. Preparación del pollo: Lava y seca bien el pollo con papel de cocina. Retira cualquier exceso de grasa y plumas sueltas. Si lo deseas, puedes rellenar el pollo con hierbas aromáticas y rodajas de limón o naranja para agregar más sabor.
  2. Sazonado: En un tazón pequeño, mezcla los condimentos elegidos con aceite de oliva o mantequilla derretida para hacer una pasta. Unta esta mezcla sobre toda la superficie del pollo, asegurándote de cubrirlo completamente con los condimentos.
  3. Precalentamiento del horno: Precalienta tu horno a una temperatura de aproximadamente 180-200°C.
  4. Horneado: Coloca el pollo en una bandeja para hornear y mételo en el horno precalentado. Cocina el pollo durante aproximadamente 20 minutos por cada 500 gramos de peso, o hasta que la temperatura interna del pollo alcance al menos 75°C en la parte más gruesa de la carne, asegurándote de que esté bien cocido.
  5. Reposo: Una vez que el pollo esté cocido, retíralo del horno y déjalo reposar durante unos 10-15 minutos antes de cortarlo. Esto ayudará a que los jugos se redistribuyan y el pollo esté más tierno y jugoso.

El resultado final será un pollo dorado y crujiente por fuera, con una carne tierna y jugosa por dentro, impregnada con los sabores de los condimentos y hierbas utilizados. Puedes servir el pollo horneado con los vegetales asados en la misma bandeja y acompañarlo con una salsa o guarnición de tu elección para una comida completa y deliciosa.