Pierna de cerdo horneada
La pierna de cerdo horneada es un plato clásico que consiste en asar una pierna de cerdo entera en el horno, lo que resulta en una carne tierna y jugosa con una piel crujiente y dorada. Es una opción popular para reuniones familiares y celebraciones festivas debido a su sabor delicioso y su capacidad para alimentar a una multitud.
Los ingredientes necesarios para preparar una pierna de cerdo horneada son los siguientes:
- Pierna de cerdo: Entera y sin hueso, preferiblemente de buena calidad y de tamaño adecuado para tu grupo.
- Condimentos: Sal, pimienta, ajo en polvo, cebolla en polvo, pimentón, romero, tomillo y cualquier otra especia de tu elección para sazonar la carne.
- Aceite de oliva o mantequilla: Para untar la pierna de cerdo y ayudar a que se dore en el horno.
- Caldo de pollo o vino blanco (opcional): Para agregar humedad y sabor durante el horneado.
Los pasos para cocinar una pierna de cerdo horneada son los siguientes:
- Preparación de la pierna de cerdo: Lava y seca bien la pierna de cerdo con papel de cocina. Retira cualquier exceso de grasa y realiza cortes superficiales en la piel para ayudar a que se dore.
- Sazonado: En un tazón pequeño, mezcla los condimentos elegidos con aceite de oliva o mantequilla derretida para hacer una pasta. Unta esta mezcla sobre toda la superficie de la pierna de cerdo, asegurándote de cubrirla bien con los condimentos.
- Precalentamiento del horno: Precalienta tu horno a una temperatura de aproximadamente 160-180°C.
- Colocación en la bandeja para hornear: Coloca la pierna de cerdo en una bandeja para hornear lo suficientemente grande como para contenerla cómodamente.
- Horneado: Hornea la pierna de cerdo en el horno precalentado durante aproximadamente 25-30 minutos por cada medio kilogramo de peso, o hasta que la temperatura interna alcance los 70-75°C en la parte más gruesa de la carne.
- Reposo: Una vez que la pierna de cerdo esté cocida, retírala del horno y déjala reposar durante unos 10-15 minutos antes de cortarla en porciones y servirla.
El resultado final será una pierna de cerdo jugosa y tierna por dentro, con una piel crujiente y dorada por fuera. Este plato es perfecto para servir como plato principal en una comida festiva o para disfrutar en una cena familiar. Puedes acompañar la pierna de cerdo horneada con guarniciones como puré de papas, vegetales asados o una salsa de tu elección para una experiencia gastronómica completa.
